25 febrero 2012

BILLETERA NO MATA VOLUNTAD POPULAR

Describiamos en http://www.henrykgrossman.blogspot.com/2012/02/trabascontroles-quitas-de-subsidios.html el modo en que se busca el control del territorio.

Se ha agregado ahora una nueva forma: la disputa por el control de la Policía Municipal para lo cual Scioli ya ha diccho que la ha de controlar el, pese a la resistencia de Mariotto (su vice gobernador)

Día tras día, el control territorial va generando una espiral de conflicto que, por ahora, no cesa en su despliegue.

Por otra, también habíamos señalado que el Gobierno se encaminaba hacia la nacionalización del comercio exterior (ver http://www.henrykgrossman.blogspot.com/2012/02/nacionalizacion-del-comercio-exterior.html ).

La nueva disposición en materia de impo/expo de servicios constituyen un nuevo paso hacia es situación pero a su vez, establece un control férreo sobre quién y porque habrá de girar divisas al exterior.

Paralelamente, se profundiza el ajuste en materia de subsidios y se presiona a YPF y a las petroleras para que no sólo realicen inversiones sino que, a su vez, contribuyan con mayor producción a revertir la importación de petroleo. En particular a YPF se le exige que repatrie las utilidades giradas en el 2010 (unos u$s1200 millones).

En el mismo sentido, es decir en la necesidad de "hacer caja" (ver:http://www.henrykgrossman.blogspot.com/2012/02/proyecto-neo-k-la-acumulacion.html ), mientras los servicios públicos se degradan (transporte público, distribución eléctrica, la ampliación de redes de agua, cloacas y gas) va quedando para otro momento (del mismo modo que la obra pública de la PBA y las intendencias donde el abandono de la infraestructura urbana alcanza límites desconocidos de abandono, el Estado Nacional resiste incrementar el mínimo no imponible para los trabajadores, elimina el Programa de Bienes de Capital y hace a los trabajadores del sector público inaceptables propuestas salariales mientras quita beneficios salariales a unos 300 mil trabajadores.

Sin embargo, comienzan a aparecer algunas grietas y sombras sobre el plan político 2013-2015.

La CGT se encamina a una crisis de representación importante y que tiene como telón de fondo la necesidad del gobierno de controlar la central de los trabajadores en la ilusión de hacerle jugar su peso político.

Sin embargo la dinámica productiva que pone el gobierno habrá de impactar en la industria y en los gremios asociados que pretenden la conducción.

No sólo el control sobre las importaciones, pese a que se "vende" como una política de sustitución de importaciones, serán motivo de roces. la discusión salarial y el modo en que las bases reacciones a ella será fuente de conflictos.

En suma. La crisis y el ajuste comienzan a expresarse con plenitud y el Gobierno muestra escaso entusiasmo por intervenir para ponerle limites.

Concentrado en su plan político 2013-2015 con altisimo grado de autismo esta en riesgo de comprobar finalmente que en política billetera no mata voluntad popular.

11 febrero 2012

POST CRISIS: DE ESO NO SE HABLA


La crisis del capitalismo es un continuo que, en algunas oportunidades, adquiere características singulares que hacen más evidentes sus impactos y consecuencias. 

Sin embargo el Gobierno Nacional, lejos de comprender la necesidad de prepararse para la post crisis, que es lo que se avecina, se enreda cada vez más en una lógica política y económica cuyo impacto social llegará irremediablemente.

Deslumbrados aún por el resultado electoral del pasado octubre se asientan esa legitimidad para postergar una re estructuración profunda de lo que llaman "el modelo" y atentos a la dinámica global, prepararse para evitar que las consecuencias de la crisis en los países centrales y los re posicionamientos a los que llevará la "post crisis" en esos países impacte de tal modo en la Argentina que existan desequilibrios e inestabilidades cuya resolución eche por tierra lo hasta acá obtenido.

El Gobierno lleva adelante políticas de pura emergencia, sin planificación alguna y resultado de errores que se le señalaron repetidamente durante los últimos años y que encerrado en su propia burbuja se negó a escuchar.

De golpe toma cuenta de que su política de subsidios alcanzaba a sectores que de ninguna manera debieron recibir un sólo peso de subsidio.

Anuncia, como si fuera un gran descubrimiento, que su política fue un fracaso completo y que, como describía Galeano, los recursos emigraron por "la venas abiertas" de la Argentina al amparo de su propia complicidad.

En la emergencia reaparece un cierto "nacionalismo petrolero" que más que guía política ideológica para transformar la matríz sectorial, tiene todos los componentes melancólicos de quienes no han podido renovar sus ideas en una sociedad que se ha transformado de cabo a rabo.

Ponen en la mira las importaciones de bienes (sean finales o insumos) que han crecido por la propia incapacidad de, por un lado alentar el desarrollo industrial y la sustitución de importaciones de un modo planificado y racional y fomentar el consumo frenético en el que basaron sus "éxitos".

Así, ahora se pretende administrar una corriente importadora con instrumentos artesanales e informales, una suerte de política comercial externa atada con alambres.

Con esa precariedad intentaran llevar adelante la política de nacionalización del comercio exterior que supone el control de cambios y el desdoblamiento del mercado cambiario

La sequía, esperada en tanto se sabía que los años denominados "Niña" tienen esa característica, les impuso más límites aún y, aunque jamás lo reconozcan, los obligo a buscar en otras "cajas potenciales" la compensación por caída que la sequía va a generar en el flujo de ingresos de divisas.

Así, apuntó a la megaminería a la que otorgó todo tipo de prebendas y que, sin importarle el costo social ni ambiental, le impone al futuro de ésas regiones y al país todo.

Obviamente, reproduce el tradicional estilo de la politiquería argentina, para cuando el futuro llegue, ellos no estarán.

Pretende poner límites a una negociación salarial que acrecentará el conflicto social resultado de haber durante años ocultado una realidad económica como la inflación y la frágil sustentabilidad del modelo económico.

A eso suma la in equidad de cobrarle ganancias al trabajo personal mediante el ardid de no actualizar el mínimo no imponible y continuar protegiendo al sistema financiero de aportar conforme las extraordinarias ganancias que, la dinámica del crédito de corto plazo fogoneado por el Gobierno Nacional, generan.

Podríamos seguir la lista de contradicciones y paradojas que nos llevan a éste estado actual de fragilidad que la soberbia gubernamental prefiere ocultar y negar mediante todo tipo de ardides.

La incapacidad de aceptar críticas y hasta meros comentarios que contradicen su propio punto de vista agrava aún más el porvenir.

La debilidad económica puede, en éstos casos convertirse en crisis política y ahí sí estamos en otros problemas de más gravedad.

09 febrero 2012

LA MINERÍA, EL "NUEVO YUYITO"

Tal como señalamos en nuestro post de hoy (09/02/12) (http://www.schwartzereconomia.blogspot.com/

"Argentina debe plantearse escenarios menos expansivos en materia financiera si es que planea sus ingresos en función de los commodities agrícolas.

Tal vez porque si se plantean éstos escenarios, la minería a cielo abierto esta hoy en el centro del debate, porque, retomado el ritmo productivo en los países centrales los comoditties no agrícolas ( materias primas e insumos industriales, petróleo, etc) sí habrán de desarrollar un ciclo expansivo.

La pregunta es, ¿puede la minería argentina compensar la baja de los commodities agrícolas?

Nuestra respuesta en principio es afirmativa, pero esa posible compensación está limitada por el modo en que la renta minera sea captada e internalizada por el Estado argentino."

Es por eso que, más allá de las críticas que se le formulan tanto por la tozudez con que se guía y que llega a reprimir salvajemente a quienes manifiestan su oposición, la minería hace a la sustentabilidad de la denominada "matríz diversificada de inclusión social" con que, los economistas de la claque oficialista denominan a éste engendro.

La minería a cielo abierto ha de aportar a sostener el modelo protofascista que requiere un sistema de punteros y caciques regionales, sobre todo en el conurbano, a los que hay que financiar con vistas a las elecciones de medio término en el 2013 y que por lo general suelen ser adversas a los oficialismos.

Esos "caciques regionales" también serán funcionales a sostener la disciplina social para lo cual habrá de permitirse la connivencia entre éstos, l"Bonaerense" y todo tipo de delitos (robos, prostitución, drogas, juego, secuestros, etc)

Por eso, el debate por los supuestos "modelos" o "metodologías" rientadas a sostener la "seguridad" no es más que una nueva perversión. Lo que esta en debate es quien controla la calle y desde esa posición controla el circuito completo del dinero clandestino.

Si algo controla el "peronismo" es esos circuitos de corrupción y despojo que permiten sostener estructuras electorales.

Paralelamente, y mientras la masa crítica de caudillos y punteros sostiene y reproduce, financiados por el delito y el propio Estado, una base de ciudadanos socialmente derrotados y marginados de modo definitivo de los circuitos del trabajo decente; los "altos funcionarios" se dedican a desarrollar todo tipo de negocios corruptos y utilizan todo su poder para lograr impunidad.

Por eso, el Gobierno actual, defiende a muerte a la megaminería y así como generó el denominado conflicto de la "125" por la apropiación de la renta derivada del "yuyito" que aunque fue derrotado igual lo usufructuó: la megaminería no encuentra actores tan poderosos para oponerse.

No descarto el valor de la movilización popular, pero los hechos de éstos días ponen en evidencia que no se pararan ante un cadáver aunque ese muerto sea declarado "mártir popular".

Crisis global: commodities, megaminería y preguntas sin respuesta

Dicen los medios de prensa internacionales que ya se da por seguro que la crisis financiera del estado griego sea resuelta mediante una quita de entre el 50 y el 70% y que, pese a las convulsiones internas, Grecia aplicara los ajustes acordados dentro de la UE.


Si bien ésta enorme destrucción de capital especulativo deberá ir acompañada por un fuerte aumento de la productividad griega que será, en otras, las razones de los conflictos sociales que deberán afrontar. 


No cabe duda que Grecia no volverá al dracma y que, pese a los costos, se encuadre en la disciplina europea.


Resuelto éste caso extremo, en un plazo no muy largo, los restantes países denominados PIGS e incluso la propia Francia alinearan sus situaciones financieras y fiscales a lo que se acuerde en el marco de la UE.


Cada uno a su manera deberá dar cuenta de mejoras sustantivas en la productividad para que, ajustado el capital financiero especulativo excedente, se reponga en los niveles deseados la tasa de ganancia.


Más allá de ésta extremadamente simple y reduccionista introducción la pregunta que debería ya estar pensando en responder como se lo pregunta un artículo de http://www.nodo50.org:


"¿Qué pasa si esto se da vuelta? ¿Qué pasa si la tasa de interés aumenta en el centro? ¿Qué pasa si el exceso de capital global en la periferia comienza a marcharse nuevamente hacia zonas de menor riesgo? ¿Qué puede pasar con Brasil, por ejemplo, país que tiene un 40% de este tipo de inversiones? Ni pensar en lo que puede pasar en Argentina si cae su socio. En efecto, los capitales excedentarios pueden y van a retornar hacia las economías centrales ni bien estas se “estabilicen” aunque mas no sea relativamente, es decir, una estabilización dentro del movimiento desestabilizador mismo de una crisis en desarrollo. Es que estos países, si bien presentan una menor retribución, poseen una mayor seguridad. Las inversiones en países de alto riesgo tienden a ser en general de corto plazo."


En nuestra visión en Argentina ni se plantean ese, para nosotros, seguro escenario.


Más aún, aunque sin acceso al mercado financiero internacional, Argentina espera que el "factor especulación" sobre los commodities, sostenga un precio bien alto para sus productos agricolas y agroindustriales.


En nuestra opinión eso no habrá de suceder.


Ajustado el capital financiero excedente, las formas especulativas (derivados, etc) también ajustarán sus metodologías y adquirirán más sofisticación pero buscaran mayores seguridades y calidad.


Pese a las manifestaciones de importantes operadores sobre que la tendencia de los valores de los commodities ya no retornaran a un ciclo a la baja, observamos que los Indices FAO de commodities están manifestando precisamente lo contrario.


Los commodities alimentarios, en tanto bienes salario, deberán necesariamente ajustarse a la baja para poder mantener salarios bajos (sobre lo que se basará parte de la mejora de la productividad) pero que permitan reproducir la fuerza de trabajo. Por ello, no se validarán precios como los actuales en los que el factor especulativo distorsiona la realidad.


Argentina debe plantearse escenarios menos expansivos en materia financiera si es que planea sus ingresos en función de los commodities agrícolas.


Tal vez porque si se plantean éstos escenarios, la minería a cielo abierto esta hoy en el centro del debate, porque, retomado el r´tmo productivo en los países centrales los comoditties no agricolas ( materias primas e insumos industriales, petroleo, etc) sí habrán de desarrollar un ciclo expansivo.


La pregunta es, ¿puede la minería argentina compensar la baja de los commodities agricolas?


Nuestra respuesta en principio es afirmativa, pero esa posible compensación está limitada por el modo en que la renta minera sea captada e internalizada por el Estado argentino.


De allí que no importen los costos sociales de la denominada megaminería, la necesidad de su existencia y desarrollo hacen al núcleo duro de los escenarios que se plantean para las post-crisis.


Muchos argentinos rechazan éste camino. ¿Cuál es el alternativo?. Argentina no dispone de otros recursos productivos transables a nivel global.


La industria no figura entre las prioridades a desarrollar como alternativa y sólo con algunos excepciones de exportaciones mercados resultado de acuerdos más políticos que económicos sobre compensaciones comerciales, las MOI carecen de competitividad para avanzar en mercados más sofisticados.


El debate debe darse porque la respuesta a las preguntas que planteamos nos serán requeridas a la brevedad y no admiten soluciones de emergencia.